Breve análisis del Chromebook Asus C300MA

Con ese precio es difícil discutir con el C300. A pesar de su diseño de baratillo, su construcción sigue siendo decente, y queda bien en el regazo, nunca alcanzando temperaturas incómodas. Los dispositivos de entrada son aceptables e inofensivos en el peor de los casos. Aunque el panel LCD no tiene absolutamente nada de especial, ofrece un brillo mejor que la media. El rendimiento es bastante bueno en su funcionamiento en general, y como siempre con los Chromebooks, los tiempos de arranque, apagado e hibernación/despertar son rapidísimos. Para una máquina básica, el C300 tiene casi todo lo que debe.

Pero, por supuesto, gastándote unos pocos cientos de pavos más puedes conseguir un buen portátil convencional (o un Lenovo ThinkPad Yoga 11e Chromebook si prefieres). Y aparte de todo eso, sigue usando Chrome OS—y las frustraciones ocasionales con sus limitaciones no se han apaciguado del todo, a pesar de que se han dado importantes pasos para mejorarlo. Le faltan un puñado de características básicas que la mayoría da por sentado en un portátil completo, desde el soporte nativo de impresión a la funcionalidad de aplicación offline completa, a problemas con los protocolos USB y NAS. Así, el C300 difícilmente bastará como máquina principal sin tener un "tradicional" PC o Mac aparte. Pero como dispositivo secundario, es uno de los Chromebooks mejor equilibrados que hemos tenido el placer de analizar hasta el momento.

Ésta es una versión acortada del análisis original. Puedes leer el análisis completo en inglés aquí.