La Gigafábrica de Tesla en Berlín asaltada por activistas climáticos: Elon Musk detiene la producción

Cientos de activistas climáticos asaltaron los terrenos de la Gigafábrica de Tesla en Berlín ayer por la mañana. Tras apoderarse de la zona exterior, fueron detenidos por la policía antidisturbios que utilizó gas pimienta cuando intentaban entrar en el edificio. Numerosos manifestantes y tres policías resultaron heridos en el enfrentamiento.

Fue el mayor ataque contra la mayor fábrica de vehículos eléctricos de Elon Musk en Europa. Sin embargo, la protesta no fue una sorpresa, ya que los manifestantes han estado viviendo en campamentos de acción en los bosques que rodean la Gigafactoría en Grünheide, Brandenburgo (a 18 millas de Berlín), desde febrero para evitar la expansión de la planta.

La producción se detiene durante un día

Elon Musk, que se vio obligado a detener la producción durante un día y permitir a los empleados trabajar desde casa en esta fecha concreta, comentó la protesta en X: "¿Por qué la policía deja escapar tan fácilmente a los manifestantes de izquierdas?" Los activistas temen que duplicar el tamaño de la planta podría tener un grave impacto en las aguas subterráneas y en el medio ambiente en general, y que habría que talar unas 110 hectáreas de bosque. Otro punto de crítica es el supuesto elevado número de accidentes laborales https://www.stern.de/wirtschaft/tesla-recherche---groesste-sorge--dass-irgendwann-jemand-zu-tode-kommt--33864072.html en la Gigafactoría.

Ole Becker es el portavoz de la alianza "Disrupt Tesla", que había llamado a la desobediencia civil, y dijo que la manifestación pretendía llamar la atención sobre la "destrucción medioambiental " en Grünheide.

Los residentes de Grünheide acogen con satisfacción la acción

En los próximos días se celebrarán talleres, debates y preparativos para la acción en el lugar, y la manifestación de ayer es sólo un paso intermedio. Los activistas no están solos en su desaprobación - varias organizaciones conservacionistas de https://brandenburg.nabu.de/umwelt-und-ressourcen/28745.html se han quejado de la falta de participación en los planes de desarrollo de la planta. Los manifestantes también cuentan con el apoyo de los vecinos de Grünheide, la mayoría de los cuales se han pronunciado en contra del plan de desarrollo y de la ampliación de la fábrica de Tesla:

Seguiremos intentando influir en los representantes locales para que este plan de desarrollo no se someta a votación.

- Manu Hoyer, de la Iniciativa Ciudadana de Grünheide

Varios ecologistas llevan mucho tiempo criticando a empresas tecnológicas como Tesla. Una crítica habitual es que las baterías utilizadas en los coches eléctricos utilizan metales de tierras raras y materias primas como el cobalto, el litio y el níquel, algunas de las cuales se extraen en condiciones desastrosas para la naturaleza y las personas en países como el Congo y América Latina. Se calcula que ya hay más de 2.000 manifestantes en torno a la fábrica, sin contar a los habitantes de Grünheide.