Un textil inteligente basado en la seda convierte el calor corporal en electricidad

Investigadores de la Universidad Tecnológica de Chalmers han ideado un nuevo textil https://www.chalmers.se/en/current/news/k-the-silk-thread-that-can-turn-clothes-into-charging-stations/ que convierte el calor corporal en energía eléctrica utilizando hilos de seda especialmente recubiertos.

La idea gira en torno a un hilo de seda conductor recubierto de un polímero plástico especial que capta la energía térmica de la diferencia de temperatura entre el cuerpo y el aire. Esto nos acerca a los aparatos para llevar puestos que no necesitan pilas.

"Los polímeros que utilizamos ofrecen ventajas únicas: son flexibles, ligeros y pueden aplicarse tanto en forma líquida como sólida sin dejar de ser no tóxicos", afirma Mariavittoria Craighero, investigadora principal y estudiante de doctorado en Chalmers.

El equipo mostró dos versiones de la tecnología: un dispositivo del tamaño de un botón y un panel de tela más grande. Estos dispositivos producen electricidad cuando hay una diferencia de temperatura, con un voltaje de salida que cambia en función de la diferencia de temperatura y de la cantidad de material conductor.

El material demostró ser duradero, manteniendo su eficacia durante más de un año y aguantando varios lavados. Después de siete lavados, aún conservaba dos tercios de su fuerza conductora, aunque tendrán que mejorarlo para su uso en el mundo real.

Ahora mismo, fabricar estos tejidos termoeléctricos lleva su tiempo. En el laboratorio, es un proceso manual que implica mucha preparación y cosido cuidadosos. Una muestra de tejido llevó cuatro días de cosido a mano.

Este avance podría cambiar la tecnología para llevar puesta, permitiendo que la ropa alimente dispositivos como los rastreadores de fitness y los sensores de salud sin necesidad de pilas normales. La tecnología utiliza la diferencia de calor natural entre nuestro cuerpo y el aire para seguir generando energía.

Este avance es un gran paso hacia los wearables autoalimentados, que insinúa un futuro en el que la ropa inteligente sea cómoda, lavable y no necesite cargar pilas.